Ya no bastan las obras de maquillaje, la ciudad de Guatemala necesita una reingeniería que solucione los graves problemas que desde hace décadas viene arrastrando. Los candidatos y sus planes de gobierno municipal y los alcaldes en funciones, no han tenido una visión futurista, previendo el crecimiento poblacional, la anexión de municipios a la capital y la deficiencia del transporte, la creciente necesidad del agua, manejo de los desechos, desagües, una red vial que haga posible circular de manera rápida y descongestionar el tránsito.

Fotografía de Elí Orozco

A ello se debe agregar, que, en el centro geográfico de la ciudad, se encuentra el basurero más grande de Centroamérica, llamado “Relleno Sanitario” de la zona 3, pero que es una de las más grandes fuentes de contaminación ambiental, atentando contra la salud de la población.

En este vertedero, basurero, relleno sanitario, o como se le denomine, se deposita la basura de la ciudad y 13 municipios más. Cada día, ingresan 550 camiones con más de 7 millones de libras de desechos sólidos, es decir, unas 3199 toneladas de basura, que al año suman, 1,167,635 toneladas. En época de lluvias, esta basura es trasladada por las aguas hacia el río Las Vacas, que la deposita y contamina el río Motagua, desembocando en el mar en las costas hondureñas. Esto ha motivado una demanda por parte de Honduras contra el Estado de Guatemala, por contaminar con desechos las costas de Omoa y otras playas del país vecino. El problema es mayúsculo, algo debe cambiar en el tratamiento que se le da  la basura que sale de los hogares, depositarla o tratarla para el reciclaje, sin que ello provoque un problema ecológico o más degradación ambiental.

Este problema está relacionado con los desagües de la capital, también maquillado con el nombre de “aguas servidas”. Del lado Norte y Oriente, salen desagües que ingresan al río Las Vacas, afluente del Motagua. En ese río se depositan muchos contaminantes que han eliminado las posibilidades de utilizar sus aguas para el consumo humano. Del Sur y Occidente, los desagües van a dar al río Villalobos, que deposita sus aguas en el Lago de Amatitlán. La principal forma de no contaminar el lago, consiste en no depositar los desechos en esa fuente de agua. No basta con echarle “agüitas mágicas”, se necesita una infraestructura que desvíe las aguas y que las deposite en otros ríos alrededor de Amatitlán. El lago tratado en esas condiciones podría surtir de agua a la ciudad capital, ubicada a solo 25 kilómetros.

Para la circulación vial y el transporte, se necesita una visión de estadista. El actual alcalde, planteó hace cuatro años la construcción de líneas de trenes, el aerómetro, fortalecer el transmetro, construir túneles para cortar distancias, construir vías rápidas, etc. Nada de eso logró construir, y las justificaciones caen en lo absurdo. En su actual propuesta electoral, regresa a plantear lo mismo, solo que ahora plantea nuevos pasos a desnivel, rotondas y puentes y por supuesto menciona la tecnología virtual para algunas actividades ciudadanas.

El problema está a la vista y no lo perciben. La ciudad de Guatemala está asentada sobre mesetas, que fueron interconectadas por medio de rellenos, puentes y algunas calzadas. Eso funcionó en el siglo pasado, pero ahora los problemas se han duplicado. Para salir del Naranjo solo se puede por el puente que comunica el periférico con la zona uno, o salir para la Calzada San Juan y luego el Trébol.  Por otras vías se encuentran barrancos y otros obstáculos que no se pueden franquear. Otros lugares de la ciudad, tienen el mismo problema, no se puede pasar sobre la pista del Aeropuerto, a fuerza por el cuello de botella que constituye el Trébol con su habitual e inevitable congestionamiento. Se necesita la construcción de muchos puentes y calzadas y túneles para conectar muchas zonas de la capital, como Ciudad San Cristóbal, puentes o desniveles que atraviesen la Calzada Roosevelt y San Juan, rediseñar la Calle Martí, y otras vías que originan congestionamiento en las horas pico, tampoco existen formas de regresar o atravesar el Periférico y otras calzadas. Todo ello provoca caos, así como sobre utilizar vehículos y combustibles.

A ello se suma el congestionamiento que se produce al no existir medios de transporte colectivo que resuelvan las necesidades de toda la población, por lo que esta consigue sus propios medios de transporte que a la larga resultan caros y escasos. El transmetro es efectivo, pero insuficiente. Se debería masificar con muchas líneas y unidades, y que “Tu Muni”, pueda exonerar un porcentaje del costo al pasaje para los usuarios, como una medida social.

El principal problema, consiste en darle solución a esas problemáticas y brindar los servicios necesarios a una población que, por su crecimiento, a 10 años casi podría duplicar sus necesidades. No se puede continuar con improvisaciones y superficialidades, o caer en el ridículo, tal como hizo un alcalde hace años, que solo se dedicó a colocar macetas con flores en las avenidas céntricas, sembrar arbolitos en las calzadas, tapar hoyos en las calles y hacer que las fuentes se vieran bonitas.