SIN TAPUJOS
Deseo a mis estimados lectores que este año 2024, sea de mucha salud, paz y prosperidad para todos los guatemaltecos. Hubiese querido iniciar mi primer artículo del presente año con un mensaje de optimismo, pero este desgobierno hasta que no salga, seguirá dando de qué hablar.
El jueves 28 de diciembre pasado, se publicó en el Diario Oficial un acuerdo gubernativo que pareció ser una broma por coincidir con el Día de los Santos Inocentes, pero no fue así, resultó ser verdadero y causó profunda molestia dentro de la población honesta.
Giammattei quiere dejar blindados a sus achichincles que le sirvieron como corderos, pero seguramente como todos tienen la cola machucada, él les quiere asegurar su vida a cambio, que el día de mañana esos exfuncionarios no lo traicionen y revelen secretos sobre los desbarajustes de su desgobierno.
Es una barbaridad que a pocos días de irse del cargo que deshonró durante cuatro años, Giammattei en un acto de abuso de autoridad, el gabinete que entregará sus cargos el próximo 14 de enero gozará de medidas de seguridad por parte de la Policía Nacional Civil (PNC) a partir del 15 de enero, porque pueden ser objeto de agresiones o represalias por las determinaciones que tomaron en su gestión, pero con ese acuerdo lo que pretende es dejar atado al nuevo gobernante, porque no solo no hay suficientes agentes de la PNC, sino que se van a necesitar como unos 1 mil 469 agentes, lo que causará mayores gastos innecesarios. He escuchado varias opiniones al respecto y ninguno asiente dicha medida.
¿De qué cuenta van a gozar de protección los salientes ministros, viceministros y secretarios de Estado por el tiempo que prestaron sus servicios? Cuando eso nunca se ha hecho con ningún gobierno, solo con las desatinadas acciones de Giammattei.
A algunos exfuncionarios se les proporcionará por cinco, cuatro, tres y un año vehículos, y desde 10 hasta 3 agentes por turno. El ministro de Gobernación, Byron Bor Illescas, se contradice al decir que no se van a necesitar más agentes a la División de Protección de Personas y Seguridad, entonces, de ¿Dónde saldrán todos los policías que se asignarán a los exfuncionarios?
Esperamos que el presidente electo, al día siguiente de su ascensión al poder derogue esta estupidez de acuerdo gubernativo, dictado por Giammattei para salvarse de todos de los reproches que la población les va a hacer por la mala gestión de los cuatro años del desgobierno del partido Vamos. Afortunadamente ya van para afuera, nos quedan 12 días para volver a la primavera democrática.
¡NO NOS VAN A CALLAR!
