Alejandro Giammattei publicó que entregará la presidencia el 14 de enero, lo cual no tiene nada de novedoso, porque cada gobierno tiene fecha de caducidad.  Lo dice con tanta tranquilidad y de tal manera, que se evidencia, que algo turbio se esconde. Tal parece, que la conspiración, como siempre lo han hecho los dueños del país, ahora aliados al Crimen Organizado que tiene cooptado al Estado, va más allá de las acciones políticas que ha tramado el Pacto de Corruptos y sus aliados. El oficialismo actual, constituye solo las figuras visibles, las personas van y vienen, pero el sistema diseñado por el poder económico del país, es manipulado a su conveniencia, violando leyes, estructuras, funcionamiento y generando corrupción. Ese sistema no cambia con cada gobierno, el cual debe garantizar que funcionará de acuerdo al diseño establecido, respondiendo a los grandes intereses del poder económico, y desde luego, “de lo que representa la embajada”.

Bernardo Arévalo

Fotografía de Fernando Chuy

El oficialismo quiso entorpecer el proceso electoral, suspendiendo a Semilla como partido para eliminarlo de la contienda. Antes, limpió el camino de partidos y personajes indeseables al sistema, que tenían grandes posibilidades de hacer caer su juego político. Pero Semilla como partido fue fundado desde las pasadas elecciones y en ese entonces no constituía una amenaza. No estuvo sujeto a las investigaciones ilegales, a las que ahora está siendo sometido y que lo colocan como advenedizo, temiendo que pueda hacer temblar su sistema político. Las maniobras sucias no pudieron colocar a Manuel Conde en el balotaje. Bernardo Arévalo con la decisión del electorado se les coló hasta la cocina, y lo tienen disputando la presidencia, situación incómoda, porque los dueños del país, solo aceptan en la contienda a los suyos, a los dóciles que pueden manejar.  Arévalo ya indicó que hará una limpia, refiriéndose a la corrupción imperante. Eso significa que todas las instituciones del Estado, cumplan con las funciones para las cuales fueron creadas para consolidar la endeble Democracia, incluyendo al Ejército que tiene la función especial de garantizar la seguridad exterior.

Constituyó un abuso de autoridad del Ministerio Público, tratar de suspender a Semilla y ahora perseguir al Registrador de Ciudadanos del TSE. Esto es un acto burdo, pasando visiblemente por encima de la legislación y de la institucionalidad. Es una situación difícil enfrentar, por cuanto el oficialismo tiene el control de las cortes, a las que el TSE, tuvo la osadía de enfrentar. Se evidencian algunas fisuras y contradicciones entre instituciones, en la aplicación de las leyes, generando algunas tímidas simpatías, y posiciones políticas que ponen distancia con el gobierno. Estas posiciones políticas siempre han existido, pero la amenaza, la fuerza y el temor a ser despedidos, los mantuvo en reserva, hasta que puedan manifestarse en condiciones políticas favorables.  Esas, se pueden incrementar al irse perfilando la intensión del voto de los guatemaltecos en la segunda vuelta. Lo que está logrando la derecha fascista, es que mientras más ataque a Semilla, más la han fortalecido, haciéndole una campaña gratis y argumentando falsedades que ahora con la revolución de las comunicaciones es fácil evidenciar.

Según se puede apreciar en el panorama político, los contraataques de la derecha fascista, se han montado con campañas mediáticas, por medio de la Guerra Psicológica, de la cual son especialistas porque la practicaron durante toda la guerra y antes para destituir al presidente Árbenz. Las mentiras han ocupado parte de la información y desinformación colocada en los principales medios. Se debe destacar que, en esta guerra de mentiras, la primera víctima es la verdad, y está dirigida a la mente humana, donde se pretende doblegar la voluntad de la población, para que tenga temor al votar por Semilla. Tiene el propósito de convertir a Bernardo en Eje del Mal, exponente del comunismo y tanto etcétera ridículo que no vale la pena repetir.  Eso lo han hecho muchas veces en la vida política del país, creando un escenario de caos e incertidumbre, y para que la gente lo creyera, lo han acompañado con el uso de la fuerza, para justificar en el corto plazo, otras acciones que podrían ser violentas. Las fuerzas de derecha, aunque divididas, están intactas manejando las instituciones del Estado y sus recursos y con el apoyo de la oligarquía que los sigue financiando, planificando sus próximas jugadas.

Se esperaría que el ahora oficialismo, tome nuevas medidas, incluso después de conocer quien será presidente. De ser Arévalo, puede que le den la presidencia con grandes condiciones, tal como hicieron con Julio Cesar Méndez Montenegro. Enfrentará una férrea y estructurada oposición en el Congreso, con las dos bancadas mayoritarias aliadas con el actual oficialismo, donde la Liga de los Corruptos le haga imposible poder gobernar.  Indicaría, además, que la confrontación impulsada por la derecha fascista, no ha terminado y se esperarían acciones de todo tipo, de los organismos del Estado que ellos pagan y controlan. Las víctimas serán el Estado de Derecho, la Democracia y sobre todo la población, que exige cambios, para que el gobierno responda a sus más sentidas demandas sin ser criminalizados.